Los siguientes son ejemplos de casos en los que el abogado ha trabajado y no garantizan que pueda producirse un resultado similar con el caso de un cliente diferente. La ley de inmigración cambia día a día, y lo que un día funciona para obtener una subvención positiva, puede seguir una subvención negativa si la ley cambia. Cada caso es diferente, por lo que siempre es recomendable que un abogado lo represente en la corte.
El primer caso de asilo manejado por la abogada fue un caso de violencia doméstica. En aquellos días, la violencia doméstica no era un terreno protegido bajo la ley de asilo, por lo que se le informó a la clienta de una batalla cuesta arriba para ganar su caso. Nina era una mujer de 20 años de Honduras que llegó a los Estados Unidos con 7 meses de embarazo. El embarazo fue el resultado de una violación por parte de un hombre que ha acosado y agredido repetidamente a mi cliente. Cuando fue a denunciar su violación a la policía, descubrió que estaban trabajando con él. Cuando su abusador se enteró, él amenazó a su familia. Ella se dirigió a los Estados Unidos y con la poca evidencia que teníamos, presentamos su caso al juez. El juez falló a nuestro favor, y ahora Nina y su hija están prosperando.
Robert vino a nuestra oficina solicitando ayuda para quedarse en los Estados Unidos. Su abogado anterior lo había obligado a tomar una salida voluntaria y no había presentado documentos importantes para su caso. Robert no entendía por qué le había pasado esto. Todo lo que decía era que tenía miembros de la familia de EE. UU. Que confiaban en él y que necesitaba quedarse. Con base en la información que proporcionó, pudimos reabrir su caso y darle la oportunidad de luchar para permanecer en los EE. UU..